Washington Heights, un legado histórico para la diáspora dominicana
Por MIGUEL COHN
El reciente anuncio sobre la designación de Washington Heights como Distrito Cultural e Histórico Dominicano del Estado de Nueva York representa un logro significativo para la comunidad dominicana en los Estados Unidos.
Este reconocimiento no solo marca un hito en la historia de la Diáspora Dominicana, sino que también resalta la importancia de preservar nuestra identidad y cultura en tierras extranjeras, una prioridad tanto para las generaciones presentes como futuras.
Este avance ha sido posible gracias al liderazgo del congresista Adriano Espaillat, quien desempeñó un papel fundamental en la aprobación del proyecto. Como el primer congresista dominicano en los Estados Unidos, Espaillat ha sido un defensor incansable de la comunidad dominicana y ha trabajado arduamente para que esta designación se convirtiera en una realidad.
Con el apoyo de instituciones clave como el CUNY Dominican Studies Institute y el Historic District Council, el proyecto fue presentado ante la New York State Historic Preservation Office (NYSHPO), y ahora Washington Heights está en camino hacia su inclusión en el National Register of Historic Places de los Estados Unidos.
Este prestigioso reconocimiento no es algo simbólico; conlleva beneficios tangibles que impactarán positivamente a los propietarios y residentes del área. La posibilidad de acceder a créditos fiscales para la rehabilitación de propiedades no solo estimula la conservación del patrimonio arquitectónico, sino que también genera un impulso económico y turístico en una zona que ha sido el epicentro de la vida dominicana en Nueva York durante décadas.
Para la diáspora dominicana este logro es un símbolo de resistencia, unidad y progreso. A lo largo de los años, nuestra comunidad ha sabido superar desafíos y transformarlos en oportunidades, y este reconocimiento oficial es una reafirmación de la capacidad de los dominicanos para prosperar y dejar huella en el extranjero sin perder su esencia.
Desde una perspectiva nacional, la relación entre la República Dominicana y los Estados Unidos se ve fortalecida por esta declaración histórica. Washington Heights es testimonio vivo de los lazos profundos que unen a ambas naciones, y su designación como Distrito Histórico reafirma el valor de los aportes de los dominicanos al tejido social, cultural y económico de los Estados Unidos.
Este logro celebra nuestra trayectoria y proyecta un futuro donde la comunidad dominicana en el exterior continúa siendo una fuerza vital en el desarrollo tanto de nuestro país como de las naciones que les han acogido. Esta designación es un reconocimiento al trabajo arduo de generaciones y un recordatorio de la importancia de mantener vivos nuestros valores y tradiciones, incluso lejos de casa.
Con este hito reafirmamos el compromiso de preservar nuestro legado para las generaciones venideras y de seguir construyendo un futuro que celebre lo mejor de lo que somos.
La comunidad dominicana puede sentirse orgullosa de este logro, un reflejo de nuestra perseverancia y contribución a los Estados Unidos, y un testimonio de la vitalidad de nuestra identidad en la Diáspora Dominicana.
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